miércoles, 27 de febrero de 2013

¿Qué sucede en verano?

Editorialmente hablando en verano nos mandamos muchos mails y además de eso, básicamente intentamos configurar el recorrido a seguir durante el año. Siempre el primer paso es el de los materiales/dinero, el segundo es definir el autor, el tercero es cómo lo editamos, un cuarto paso es cuándo editamos y hay un quinto respecto a cómo distribuimos. 
Además de darnos cuenta que sabemos ordenar cardinalmente nuestro panorama, notamos que en ese mapa mental trazado nos cuesta retomar las tareas editoriales después de vacaciones. Sin embargo, poco a poco vamos tomando posición lentamente y venciendo la quietud, porque el verano es la estación donde el tren del calor sólo se detiene ante el ventilador y el aire acondicionado.


Por eso durante estos meses Editorial Simulcoop, puntualmente Ana Barbieri / Romina Rocío (ilustradoras) y Vera ♥ colaboraron y siguen colaborando con Señorita textil ,que borda mejor que cualquier abuela, en la realización de cuadernos y anotadores artesanales. Todos están cosidos en cuadernillos y en copta, los cuales dan como resultado, y hay que decirlo: verdaderas joyas. ¡Posta, son realmente unas preciosuras! y esto además es una buena forma de ir poniéndonos a tono con nuestro trabajo y todo lo que queremos hacer en este año 13. 

Los mantenemos al tanto...

Mientras tanto


Mientras se reimprimen más ejemplares de "Manifestación de todo lo visible", de Rodrigo Arreyes y "La mecánica de los días" de Melisa Papillo (Simulcoop 2012), subimos un poema de la escritora chilena Elizabeth Neira Calderón junto a una de las imágenes que Romina Rocío ilustró para la filosa reseña de Damián Lamanna Guiñazú publicada en  La revista Ni Un Paso Atrás, noviembre 2012.

ABYECTA

Me he acostado con tu padre, tu hermano y tu
hijo, por no nombrar a tu tío y a todos tus amigos.
Con tu abuelo fue imposible y tu madre se salvó
por vinagreta.
No puedo dejar de nombrar a los vecinos,
los cabros del bloque,
los de los flipper,
los volados de la plaza y de la esquina;
el lechero, cartero, repartidor del diario, gásfiter,
electricista, zapatero, jardinero y la casi totalidad
de trabajadores de servicio a domicilio que han
tenido la fortuna de pasar por mi casa y la tuya.
Y es que tengo un apetito descomunal y no perdono
erección.
Soy una adicta, dicen...
siempre,
pero es que invariablemente siempre,
quiero.
Además no discrimino.
El tamaño no me importa;
ni el grosor de las billeteras, tampoco el color de
la piel,
si tiene auto o bicicleta
si usa tarjeta dorada o está en DICOM, si tiene
casa propia o mediagua;
mucho menos si me ama o no me ama,
si me respeta o si me quiere para el puro hueveo,
si es machito, de pelo en pecho, o mariquita, tonto
o inteligente, necio o sabio, ladrón o policía,
lento o rápido, cuerdo o ....sicótico...
Juro,
que a la hora de los q’iubo nada de eso me importa.

Y aunque condón no uso, (la iglesia lo prohibe)
venéreas parece que no tengo, parece...
Excepto un herpes travieso que me tapiza la
boca de llagas cada cierto tiempo.
a veces orino de pie, me excita,
o lo hago en piscinas y duchas públicas,
usualmente veo pornos y me masturbo como
una demente el día entero.

Otra cosita es que soy comunista y última de rota,
voté por la Gladys y no me depilo
no cocino ni un huevo frito y me gusta opinar en
conversaciones de hombres.
Te advierto... que detesto el sexo anal,
pero si me tratas con dulzura
terminaré comiendo de tu mano y
lamiendo la suela de tus zapatos.

Te aviso,
que soy ágil con las cuchillas,
tengo buena puntería y reflejos en óptimo estado,
y que, a pesar de éstas y otras destrezas
que ostento en las manos, dedos y lengua ...
especialmente,
según me han contado,
en las discos me va bastante mal.
Y me pasa últimamente que
nadie se me acerca y me siento sospechosamente
repugnante como pescado de feria que no se vendió.
Y la verdad es que ya no tengo quince años
como para ir a esos lugares, llenos de púberes en
plena floración. Niñitas lindas de senos como dos
tazas de leche y coñito con olor a nata.
Otro problemita que no te podría callar
es que producto de
un dilatado alcoholismo que me ha tenido
desde hace años
azotando la cabeza contra las barras de los bares
más cochinos de esta ciudad,
padezco de ciertos trastornos... gástricos,
de variada gravedad y abyección,
como por ejemplo, la acumulación de gases intestinales,
que a veces,
generalmente en público,
pugnan por salir de su prisión.

Te advierto
que estoy muy sola,
que esta soledad me duele en exceso mucho
y que ante el menor indicio de abandono, real o
imaginario, sería capaz de perseguirte a ti y a tu
familia por todo el país,
convertirme en tu sombra y luego en tu peor
pesadilla
para terminar asesinándote y
exhibiendo tus genitales en la plaza pública,
contenidos en tu boca.

Y es que además de puta, soy loca, floja, sucia, tonta, terca,
ignorante, sorda, bruta, torpe, coja y mala.